La mayoría de las mujeres tienen dolores menstruales en algún momento de su vida. El término médico de estos dolores es dismenorrea. El dolor que causa la menstruación puede sentirse en la parte inferior del abdomen, pero también puede irradiarse a la espalda y los muslos.
Los dolores menstruales son un malestar muy común. Algunos estudios sugieren que aproximadamente el 75 por ciento de las mujeres jóvenes y el 25-50 por ciento de las mujeres adultas sienten dolor o malestar durante el periodo. Hasta un 20 por ciento de las mujeres sienten un dolor tan fuerte que no pueden realizar sus actividades cotidianas.
La mayoría de los dolores menstruales son consecuencia del efecto secundario del proceso natural de menstruación. Sin embargo, en algunos casos, los dolores pueden ser consecuencia de una enfermedad subyacente. Generalmente, los dolores menstruales pueden tratarse en casa. Sin embargo, si los dolores son fuertes, quizás deba consultar al médico de familia.
Los síntomas
El síntoma principal de los dolores menstruales son los calambres musculares dolorosos en la parte inferior del abdomen. A veces, el dolor sobreviene por espasmos intensos, mientras que otras veces puede ser un dolor sordo, pero más constante. A veces, los dolores menstruales pueden irradiarse a la parte inferior de la espalda y a los muslos. También puede notarse que el dolor cambia con cada periodo. Además de notar dolor en el abdomen, se pueden tener otros síntomas: dolor de cabeza, cansancio, debilidad, mareos y diarrea.
Generalmente, los dolores comienzan cuando se empieza a sangrar, aunque algunas mujeres los sienten varios días antes del comienzo del periodo. Normalmente, los dolores menstruales duran 12-24 horas, aunque en los casos más graves pueden ser varios días. El dolor suele ser peor cuando el sangrado es más abundante. Los síntomas de los dolores menstruales suelen ir desapareciendo a medida que se envejece. Muchas mujeres también notan una mejoría después de haber tenido hijos.
Las causas
La mayoría de los dolores menstruales son efecto secundario del proceso natural de menstruación. Los dolores ocurren cuando se contrae la pared muscular del útero. Durante el periodo, la pared del útero se contrae fuertemente para estimular la descomposición de la mucosa como parte de la menstruación mensual. Este proceso puede hacer que el organismo libere unas sustancias químicas que desencadenan el dolor.
Durante el periodo, el organismo también produce otras sustancias químicas denominadas prostaglandinas. Esta sustancia química estimula la contracción de las paredes del útero, aumentando así el grado de dolor. Existen dos tipos principales de dolores menstruales. La dismenorrea primaria que es un efecto secundario natural de la menstruación. La dismenorrea secundaria cuya causa es una enfermedad subyacente.
Algunas enfermedades que pueden causar la dismenorrea secundaria son: endometriosis (cuando las células que normalmente revisten el útero, empiezan a crecer fuera de éste), fibromioma uterino (tumores no cancerosos en el útero) y enfermedad inflamatoria de la pelvis (una infección de los órganos reproductores internos). Los dispositivos intrauterinos (un tipo de anticonceptivo que se inserta en el útero) también pueden provocar dolores menstruales.
El diagnóstico
La mayoría de las mujeres con dolores menstruales creen que son lo suficientemente leves como para diagnosticarlos y tratarlos en casa. Sin embargo, deberá consultar con su médico de familia si el periodo le está causando dolores fuertes. Aunque en la mayoría de los casos la causa de los dolores no es una enfermedad subyacente, el médico de familia puede creer necesario el reconocimiento físico para eliminar o detectar otras enfermedades. Si los dolores menstruales no responden al tratamiento o si el médico de familia cree que se deben a una enfermedad subyacente, la puede remitir al especialista, normalmente un ginecólogo.
El ginecólogo realizará una serie de pruebas y procedimientos para determinar la causa de los dolores menstruales. Estas pruebas pueden incluir una ecografía pélvica (cuando se usan ultrasonidos para crear una imagen de los órganos reproductores internos) o una laparoscopia (cuando se inserta un microscopio en el abdomen a través de una incisión). También puede ser necesaria una histeroscopia (cuando se introduce por la vagina un telescopio fino hasta llegar al útero).
El tratamiento
Generalmente, los dolores menstruales se pueden tratar en casa. Aunque no se pueda aliviar el dolor del todo, existen medidas para calmarlo o reducirlo.
- El ejercicio físico,
- La aplicación de calor en el abdomen o darse una baño de agua caliente pueden calmar el dolor.
- Los masajes y las técnicas de relajación también pueden ser útiles.
- En la mayoría de los casos de dolores menstruales, el médico de familia le aconsejará que tome un fármaco antiinflamatorio sin esteroides, como el ibuprofeno. Estos fármacos son eficaces en aproximadamente el 70 por ciento de las mujeres con dolores menstruales. Si no funcionan, es posible que le receten unos calmantes más fuertes para el dolor.
Los fármacos antiinflamatorios sin esteroides no son adecuados para las personas con asma, problemas de estómago, riñón o hígado, o para las mujeres embarazadas o que están dando el pecho. La aspirina no debe administrarse a los niños menores de 16 años. Si necesita un anticonceptivo, le pueden recetar una píldora anticonceptiva combinada por vía oral. Además de evitar que se quede embarazada, este tipo de píldora también puede aliviar los dolores menstruales. Si la causa de los dolores menstruales es una enfermedad subyacente, el tratamiento dependerá de la enfermedad que causa los dolores.